Los ejercicios rusos Vostok-2010

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Alexandre Calvo Cristina

El 8 de julio finalizaron las maniobras Vostok-2010 que desde el 29 de junio venían realizando las Fuerzas Armadas rusas. Son muchos los observadores que las han visto como una advertencia a China, siendo a la vez un test de las reformas militares actualmente en marcha en Rusia.

El primer hecho a destacar de estos ejercicios ha sido su amplitud, tanto en el aspecto geográfico como a nivel de efectivos, que ha superado en mucho a los últimos realizados en el año 2008. Otro aspecto reseñable ha sido su condición de ejercicio conjunto-combinado de nivel estratégico y de proyección de fuerzas más que táctico. Las primeras maniobras de un ejercito ruso reformado.

Vostok-2010 ha consistido en el desarrollo de diversos ejercicios, operaciones, maniobras y movimientos de fuerzas, en las que han participado todo tipo de unidades y sistemas de armas de las FAS rusas.

En ese aspecto cabe destacar Ejercicios de tiro con misiles aire-tierra en el polígono de Telemba, a cargo de cazas MiG-31 y Su-27. Un ataque aéreo (simulado) contra Khabarovsk, capital del Distrito Federal del Oriente Lejano y situado a tan sólo 30 kilómetros de la frontera china, por aviones "enemigos" materializados por cazas Su-24 y Su-25, con neutralización por parte de la defensa antiaérea mediante el empleo de misiles tierra-aire S-300. Ejercicios antisubmarinos en el Mar del Japón. Un asalto anfibio a gran escala. Proyección de fuerzas de nivel brigada a grandes distancias.

Respecto al volumen de efectivos empleados, según fuentes del ministerio de Defensa ruso, han tomado parte en los ejercicios Vostok-2010 20.000 soldados, 70 aeronaves, incluidos 20 aviones y helicópteros de la Aviación naval, 30 barcos de guerra, 2.500 vehículos y otros materiales pesados de ruedas y orugas.

Junto con su considerable escala y extensión geográfica, dos hechos demuestran la importancia que el Kremlin ha dado a las maniobras. En primer lugar, el ser dirigidas personalmente por el General de Ejército Nikolai Makarov, Jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa y, en segundo, la presencia del presidente Dmitry Medvedev, quien presenció parte de los ejercicios navales a bordo del crucero pesado de propulsión nuclear "Pyotr Veliky" (Pedro el Grande).

Lucha contra la piratería y el terrorismo

Oficialmente el objetivo de Vostok-2010 era llevar a cabo prácticas de lucha antiterrorista y contra la piratería. Sin embargo, los medios y unidades desplegadas, así como la naturaleza de algunas de las prácticas, han dejado claro que estaba en juego mucho más. Al fin y al cabo, los terroristas no suelen emplear submarinos.

Siendo realistas podemos adivinar algunos de los fines de las maniobras, cuyo nombre Vostok (Este) también es significativo. Disuadir a China, mediante una demostración de fuerza militar. Enviar una señal a Japón, de la misma naturaleza. Medir y verificar el progreso en las reformas militares en curso. Detectar puntos débiles a corregir en un futuro.

En palabras de Rusnavy.com, Web dedicado a la Marina de Guerra rusa, "difícilmente debe sorprender que este tipo de maniobras tengan lugar en el teatro de guerra del Pacífico, puesto que esta región es y seguirá siendo una de las zonas más propensas al conflicto para Rusia los próximos 20-30 años".

Mensaje para Beijing

Aunque a menudo se les presenta como socios estratégicos, es mucho lo que divide a Moscú de Beijing. El Kremlin está preocupado por los desequilibrios económicos y demográficos entre los dos lados de sus largas fronteras con China, la copia de muchos sistemas de armas vendidos a Beijing, y su penetración sin pausa en Asia Central, considerada por Rusia como parte esencial de su deseada esfera de influencia.

Aunque un futuro conflicto con China no tiene porque, necesariamente, tomar la forma de un enfrentamiento armado, dicha posibilidad es uno de los motores que impulsan las actuales reformas militares en Rusia. Dado que tardarán años en dar fruto, Moscú se ha visto obligado a reforzar el papel de su arsenal nuclear táctico en su doctrina bélica.

¿Un examen de las reformas militares rusas?

El ejercicio Vostok-2010 ha tenido lugar dos años después del inicio de las actuales reformas militares rusas y, como se ha podido observar y han reconocido fuentes oficiales, ha supuesto una primera prueba a gran escala de algunos de sus aspectos.

Tradicionalmente, la antigua y moderna Rusia y entre las dos, la Unión Soviética han basado su defensa en un enorme ejército permanente, desplegado a lo largo de las posibles rutas de invasión. El tamaño del país, así como el pobre estado de sus vías de comunicación, han sido dos factores geográficos que han motivado esta política.



Tras el fin de la Guerra Fría, algunas voces propusieron reorganizar y reformar las Fuerzas Armadas rusas, al objeto de reducir su tamaño, profesionalizarlas, mejorar su nivel tecnológico, y convertirlas en más ágiles, posibilitando su despliegue a largas distancias.

No fue, sin embargo, hasta la guerra con Georgia en el verano de 2008 que el Kremlin se decidió a dar el paso decisivo. Aunque finalizase en victoria tras pocos días de combate, el conflicto puso en evidencia las graves deficiencias de la maquinaria militar rusa, deficiencias que las reformas actualmente en curso pretenden remediar.

Algunos de los aspectos de estas reformas se han podido observar en el curso de Vostok-2010, como la transformación de divisiones en brigadas, capaces de operar autónomamente. Dos de las nuevas brigadas llevaron a cabo marchas por territorio inexplorado, con la misión de "localizar, aislar y eliminar un conflicto armado doméstico en territorio ruso".

Un renovado énfasis en el despliegue a larga distancia de unidades, con su correspondiente apoyo logístico. Se desplazaron tropas de la Rusia europea hacia el Lejano Oriente sin material pesado, para activar y emplear el preposicionado en depósitos locales.

En palabras de Valeriy Shcheblanin, portavoz del Distrito Militar de Siberia, se utilizó por primera vez un "Sistema de control único integrado de fuerzas de misiles antiaéreos y defensa aérea de fuerzas terrestres, completamente nuevo", empleándose también "sistemas de simulación por ordenador y de análisis y evaluación digital de situaciones" y "sistemas automatizados de mando y control".

Ligado al punto anterior, se estableció una mejor coordinación entre las Fuerzas Armadas y otras instituciones de seguridad, como el Servicio Federal de Seguridad y su Guardia de Fronteras.

La fusión prevista entre los servicios de apoyo a la retaguardia y la dirección general de armamentos, diseñada para eliminar duplicidades, fue puesta a prueba de forma experimental durante las maniobras. Según el general Dmitry Bulgakov, responsable de los Servicios de Apoyo a la Retaguardia, "existe, sin lugar a dudas, una duplicidad de funciones, por lo que es necesario fusionar los sistemas de apoyo existentes en un sistema único de soporte logístico".

Una acción y empleo más coordinado del poder naval, superando la división entre flotas aisladas. En las maniobras Vostok-2010 participaron unidades pertenecientes a tres flotas distintas, las del Norte, Mar Negro, y Pacífico.


Carencias de primer orden

No todo han sido éxitos en las maniobras, puesto que Vostok-2010 ha puesto también de manifiesto notables deficiencias que siguen sin corregirse y que comprometen gravemente el potencial bélico ruso. Nos referiremos brevemente a dos, dentro del campo de las fuerzas aéreas.

En primer lugar, el insuficiente número de aviones de reabastecimiento en vuelo. Algo que se puso de manifiesto en el ejercicio pues en el mismo participaron diversos aviones Su-24 y Su-34 con base en otros teatros, que acudieron al lejano Este ruso repostando en vuelo, pero las capacidades rusas en este campo distan mucho de las estadounidenses. Rusia solamente dispone de un modelo de avión capaz de suministrar carburante en vuelo, el Il-78 Midas, y en el muy pequeño número de 19 unidades.

Una segunda carencia es la de aviones no tripulados (UAVs). La falta de modelos nacionales de calidad llevó a Moscú a adquirirlos de Israel pero, según explicó el Jefe del Estado Mayor ruso, general Macarov, "no hubo tiempo suficiente para formar al personal en su empleo", por lo que en Vostok-2010 solamente se desplegaron UAVs de corto alcance fabricados en Rusia.

Protestas diplomáticas japonesas

Uno de los escenarios de las maniobras fue la isla de Etorofu, donde se desplegaron unos 1.500 soldados. Se trata de una de las cuatro islas ocupadas por la Unión Soviética en los últimos días de la Segunda Guerra Mundial en el Pacífico.

Tokio jamás ha renunciado a la soberanía sobre lo que denomina "Territorios del Norte", denunciando periódicamente su "ocupación ilegal".

El primero en protestar en nombre del ejecutivo nipón fue el secretario del gobierno, Yoshito Sengoku, quien declaró que "no podemos aceptarlo [las maniobras] en virtud de nuestra postura jurídica relativa a los Territorios del Norte". Posteriormente también se manifestó públicamente el vicesecretario de prensa del ministerio de Asuntos Exteriores, Hidenobu Sobashima, quien añadió que el comportamiento ruso era "extremadamente lamentable" y que podría provocar "sentimientos negativos" contra Rusia por parte del pueblo japonés.

* Alexandre Calvo Cristina
Profesor de relaciones internacionales, European University